Periodista: Alondra Ávila
Medio: Portal Milenio
«El afán desmedido, incontrolado y recurrente por adquirir cosas innecesarias para llenar un vacío o un hueco, son algunas de las características del comprador compulsivo, cuyo origen está relacionado, principalmente, con problemas psicológicos o emocionales», refirió Francisca Aurelia Ruiz Vázquez.
«Por lo regular, los pacientes traen ansiedad, depresión y una baja autoestima, es decir, un trastorno y problemas emocionales. Hacemos un diagnóstico previo para poder dar el tratamiento, muchas veces no basta con la atención psicológica y hace falta atención médica».
Lo más importante –dijo- es concientizar al paciente de que tiene un problema y debe ayudarse, pues en muchos casos tiene deudas económicas muy fuertes en casas de empeño, con el banco o personas, «no les importa empeñar el carro o sus joyas, solo quieren seguir comprando».
Los factores son muchos y diversos, según la persona, aunque la constante –expresó- son los problemas en casa, rupturas de pareja, baja autoestima y abandono en la infancia que repercute en la vida.
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