Reportero: redacción
Medio: Portal “La Verdad”
CIUDAD DE MÉRIDA.- El impacto fue inmediato. Las promociones del Buen Fin y la cercanía de la Navidad, incrementan el número de pignorantes que acuden a las casas de empeño a depositar diversos artículos, entre los que destacan joyas, aparatos electrónicos y automóviles.
Hasta hace cuatro años había 600 casas de empeño en el estado, aunque actualmente, se tienen registradas sólo 400 que operan en la formalidad, pues muchas cerraron debido a que no cubrieron las normas establecidas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (Cnbv), la Procuraduría de la Defensa del Consumidor (Profeco) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), que son las autoridades que las vigilan.
El gerente de una firma que tiene más de 30 años en el mercado y opera a nivel nacional, Israel Ordoñez R., explica que este giro comercial acabó con los agiotistas.
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