Periodista: Redacción
Medio: El Economista
Salir de la cuesta de enero puede requerir algunos préstamos, de entre los cuales los empeños son algunos de los más fáciles de conseguir, por lo cual debe conocer todo lo que conlleva.
El empeño es la acción de dejar en depósito y como garantía una prenda de su propiedad a cambio de una suma de dinero en efectivo (préstamo) que se le otorga de manera inmediata, refiere la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Aunque recurrir a esta modalidad de crédito es recomendable sólo en casos de emergencia, si se ve en la necesidad de solicitar un préstamo prendario, tome en cuenta si tendrá los recursos para recuperar su prenda.
Es importante que investigue y compare la valuación de su prenda, ya que pueden existir diferencias significativas entre las valuaciones de distintas instituciones.
La comisión también exhorta a utiliza el Costo Anual Total como medio para comparar entre una casa de empeño comercial y otra; no olvide revisar si éste considera o no el Impuesto al Valor Agregado.
Además, cerciórese de que la casa de empeño exhiba sus tarifas en pesos mexicanos, y lea detenidamente el contrato, ya que esto le permitirá conocer y tomar en cuenta las condiciones a las que se compromete.
“No se quede con dudas y pregunte por los conceptos que no le queden claros. Pregunte a cuántos refrendos (renovaciones del contrato) tiene derecho y cuánto tiempo extienden el plazo para recuperar sus pertenencias en caso de que no pueda cumplir con el pago”, indica la dependencia.
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