Periodista: Por Benny Cruz Zapata
Medio: Portal El Mercurio de Tamaulipas.
Las vacaciones son temporada alta para las casas de empeño ya que es un hecho que la población en estas fechas tiende a resolver su problema de liquidez para viajar en negocios de este tipo, por lo que se hace necesario estar en alerta para no pagar las consecuencias.
La Procuraduría Federal del Consumidor detalla que el servicio que prestan las casas de empeño está asociado con los consumidores que buscan liquidez inmediata y, en muchos casos, por situaciones no previstas. Por ello, antes de empeñar, se debe de saber que las casas de empeño están reguladas por la NOM-179-SCFI-2007 de Servicios de mutuo con interés y garantía prendaria; y que la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) protege a los consumidores que acuden con estos proveedores.
Además, la PROFECO en el ámbito de sus atribuciones, a fin de proteger los derechos de los consumidores y promover su acceso a servicios bajo condiciones de equidad, lleva a cabo acciones de verificación y vigilancia en este sector como parte de su Programa Nacional de Verificación y Vigilancia de Casas de Empeño.
En este contexto Ramiro Cruz Pérez encargado de Prendamex negocio de empeño expone que desde inicio de semana ha aumentado la clientela en casi un 100%, ya que diariamente en temporada normal se da atención a un promedio de 150 personas y ahorita son casi 300 las que acuden a empeñar desde televisiones hasta joyería.
Asegura que la afluencia de clientela no ha modificado las tarifas de cobro, y se han mantenido los mismos intereses así como las cantidades que prestan; da por ejemplo que por una computadora se dan el préstamo hasta mil pesos, por los cuales en un mes se pagan 250 de intereses, igual con los celulares que son los artículos que más dejan:
“Ahorita vienen a empeñar para salir de paseo, es una de las mejores temporadas pero esto no significa que se aumenten intereses o se dé menos dinero por los artículos, en nuestro caso no podemos caer en el abuso porque somos una cadena nacional y nos apegamos a la normatividad, incluso a los reglamentos que tiene la Procuraduría del Consumidor”.
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